Vieques es el nombre de una pequeña isla de Puerto Rico, a sólo 10 kilómetros de la isla principal del país. La isla, es uno de los últimos paraísos poco alterados de la Tierra. Aunque durante años, en manos de la Marina de los Estados Unidos, la isla se pudo conservar en gran parte, como un paraíso virgen entre playas interminables, colinas, y gracias al traslado de la base militar, abierta al público en su mayor parte, para quien esté dispuesto a descubrirla.
La isla de Vieques, se abre al turismo con sus maravillas naturales que muchos aseguran, no estarán intactas por mucho tiempo. Los ojos puestos por el turismo masivo podrían cambiar rápidamente el panorama. Pero por ahora, todo se conserva con una increíble belleza intacta. Vieques sigue controlada por Servicios Federal de Pesca y Vida Silvestre de Estados Unidos, algo que debería garantizar un mínimo grado de conservación del paisaje.
La isla tiene unos 34 kilómetros de largo y 5 de ancho. Cuenta con dos ciudades, Isabel II y Esperanza, emplazada junto a la Bahía Sun, una playa de ensueño.
La isla cuenta con un ecosistema propio, con variedad de ejemplares de fauna, entre ellos iguanas, pelícanos, y las estrellas de la isla, los protozoos flagellate, responsables del mágico efecto natural de la bahía de bioluminiscencia o Puerto Mosquito. En ella, se produce un fenómeno natural en el que unos organismos microscópicos al ser agitados producen un efecto lumínico.
En Vieques no faltan arrecifes de coral en la costa, un paraíso para el buceo, además de sitios de interés como el Fortín Conde de Mirasol, La Casa del Francés, el Faro de Punta Mulas y sobre todo playas magníficas. Quien ha leído hasta aquí, ya lo sabe, la isla de Vieques nos espera con maravillas intactas para encontrarnos con el auténtico paisaje del Caribe.
Via: locuraviajes
La isla de Vieques, se abre al turismo con sus maravillas naturales que muchos aseguran, no estarán intactas por mucho tiempo. Los ojos puestos por el turismo masivo podrían cambiar rápidamente el panorama. Pero por ahora, todo se conserva con una increíble belleza intacta. Vieques sigue controlada por Servicios Federal de Pesca y Vida Silvestre de Estados Unidos, algo que debería garantizar un mínimo grado de conservación del paisaje.
La isla tiene unos 34 kilómetros de largo y 5 de ancho. Cuenta con dos ciudades, Isabel II y Esperanza, emplazada junto a la Bahía Sun, una playa de ensueño.
La isla cuenta con un ecosistema propio, con variedad de ejemplares de fauna, entre ellos iguanas, pelícanos, y las estrellas de la isla, los protozoos flagellate, responsables del mágico efecto natural de la bahía de bioluminiscencia o Puerto Mosquito. En ella, se produce un fenómeno natural en el que unos organismos microscópicos al ser agitados producen un efecto lumínico.
En Vieques no faltan arrecifes de coral en la costa, un paraíso para el buceo, además de sitios de interés como el Fortín Conde de Mirasol, La Casa del Francés, el Faro de Punta Mulas y sobre todo playas magníficas. Quien ha leído hasta aquí, ya lo sabe, la isla de Vieques nos espera con maravillas intactas para encontrarnos con el auténtico paisaje del Caribe.
Via: locuraviajes