Monte Albán es uno de los destinos principales, las ruinas zapotecas con su enrome plaza y los edificios piramidales que despiertan la imaginación. Imposible perderse semejante paseo. También, a una hora y media de la ciudad hay una serie de manantiales de aguas minerales que le han dado forma a extrañas formaciones de rocas calcáreas que merecen ser visitadas: el agua continúa burbujeando entre ellas, se puede caminar, hacer rapel y quedarse de campamento. Está además el Centro Cultural Santo Domingo que funciona en un antiguo y remodelado convento del siglo XVI, con museo de historia, jardines y hemeroteca. Si vas un viernes tendrás la posibilidad de disfrutar en su patio central distintos eventos culturales.
Hablando de cultura hay ciertas fechas muy importantes y coloridas en Oaxaca: el Día de los Muertos es una, la Semana Santa es otra y en julio se desarrolla la Guelaguetza, la fiesta mas importante en todo el año aquí en Oaxaca. Se trata de un evento que reúne a las 18 etnias que viven en el estado y que tiene sus orígenes en un pacto de paz entre los zapotecas y los mixtecas. La fiesta dura más de seis horas y hay bailes tradicionales y puestos de comida y artesanías. Y si caes días antes de Navidad podrás presenciar otra fiesta típica, la Noche de los Rábanos. esta se celebra la noche del 23 de diciembre en el zócalo de la ciudad a dónde los hortelanos y granjeros llevan las obras artísticas que hacen con los rábanos y totomoxtles. Las figuras talladas tiene que ver con la Navidad y la noche se cierra con fuegos artificiales, música y bailes.