Y si estás de visita en la Capital Argentina, nomás cruzando el Río de la Plata se pueden conocer algunas ciudades de la República Oriental del Uruguay, un país vecino y con muchas tradiciones en común, como el “mate”.
Como decíamos al comenzar ésta entrada, lo único que hay que hacer es cruzar el río y, del otro lado, ese increíble país que es Uruguay estará esperando lleno de opciones para recorrer. Entre ellas, destinos de sol y playa, y la más intensa movida cultural, o imperdibles travesías nocturnas por la rivera, una visita al puerto fluvial, y por qué no al centro urbano y comercial, o a su centro histórico en la ciudad capital Montevideo.
Pero hay un paraje muy bonito que no se puede dejar de recorrer: se trata de Santa Ana, un lugar ubicado a 25 kilómetros solamente de la ciudad de Colonia del Sacramento. Por las dimensiones del lugar, no lleva mucho tiempo recorrerlo, incluso si se lo hace en bicicleta, o a pié. No podemos dejar de recomendar la particularidad de sus puestas de sol sobre el Río de La Plata al final de cada día.
Así que a prestarles atención, sobre todo si se busca tomar fotografías románticas para el recuerdo. Además, hay un frondoso bosque muy tentador para un buen picnic que reponga las energías gastadas durante la travesía. Y también, por supuesto, otra opción imperdible es Montevideo, con el encanto de sus calles adoquinadas y de estilo, todavía, colonial, que mezclan la vorágine típica de una ciudad capital con las bondades de su paisaje natural.
Como decíamos al comenzar ésta entrada, lo único que hay que hacer es cruzar el río y, del otro lado, ese increíble país que es Uruguay estará esperando lleno de opciones para recorrer. Entre ellas, destinos de sol y playa, y la más intensa movida cultural, o imperdibles travesías nocturnas por la rivera, una visita al puerto fluvial, y por qué no al centro urbano y comercial, o a su centro histórico en la ciudad capital Montevideo.
Pero hay un paraje muy bonito que no se puede dejar de recorrer: se trata de Santa Ana, un lugar ubicado a 25 kilómetros solamente de la ciudad de Colonia del Sacramento. Por las dimensiones del lugar, no lleva mucho tiempo recorrerlo, incluso si se lo hace en bicicleta, o a pié. No podemos dejar de recomendar la particularidad de sus puestas de sol sobre el Río de La Plata al final de cada día.
Así que a prestarles atención, sobre todo si se busca tomar fotografías románticas para el recuerdo. Además, hay un frondoso bosque muy tentador para un buen picnic que reponga las energías gastadas durante la travesía. Y también, por supuesto, otra opción imperdible es Montevideo, con el encanto de sus calles adoquinadas y de estilo, todavía, colonial, que mezclan la vorágine típica de una ciudad capital con las bondades de su paisaje natural.