La secretaría de Turismo de la ciudad de México desea dar un trato preferencial a los visitantes que lleguen ya sea de otras ciudades o del extranjero, y para ello ha dispuesto la creación de la figura de un Defensor del Turista. Este Defensor tendrá la misión de que los viajeros estén protegidos, y no sean víctimas de ningún tipo de discriminación, ya sea por su raza, religión, ideologías, creencias o preferencia sexual.
Al mismo tiempo, en las próximas reuniones de la Organización Mundial del Turismo, se discutirá si esta figura del Obudsman turístico será aplicable a otros destinos.
De esta forma, la idea es crear una normativa internacional a la que se acojan todos los países que así lo consideren, y que se comprometan a no discriminar, a tratar dignamente a los turistas, respetando de esta forma a todos los turistas del mundo.
En el caso concreto de la ciudad de México, toda persona emigrante que provenga del interior de la República o de otras naciones, recibirá el reconocimiento de huésped, ya sea con la finalidad de residir en el Distrito Federal o de trasladarse hacia otra entidad federativa o al extranjero, sin consideración sobre su situación migratoria.
