Se ubica precisamente en el número 28 de la calle Tacuba, en pleno casco histórico de la capital azteca. Tiene sus puertas abiertas desde el año 1912 y su edificación se conserva desde entonces con pocas alteraciones, en una señorial casona del siglo XVII.
En todos estos años, mucho ha ocurrido en el Café de Tacuba: se han celebrado bodas y se han cometido asesinatos – el del político Manlio Fabio Altamirano, en 1936 –, se han visto fantasmas, entre otras cosas.
Allí se puede disfrutar de un rico café o bien se puede optar por productos más tradicionales de México como un delicioso y humeante tazón de chocolate, y si no, directamente algo de la cocina más tradicional y picante mexicana: tacos, tamales, enchiladas y chilaquiles de pollo.
El Café de Tacuba está decorado al típico estilo tradicional mexicano y diferentes pinturas clásicas a lo largo de sus instalaciones.
Por ello, no te dejes de dar una vuelta por el Café de Tacuba de la ciudad de México cuando tengas oportunidad de viajar a México.