El mismo se ubica en el barrio coreano de Los Ángeles y en el edificio en el que funcionó durante muchos años el Hotel Normandine, una lujosa construcción de los años 20 que se alza en la Normandine Avenue y la 6th. Street.
De este modo, el empresario encargado del proyecto, Dennis Peron, habla del concepto de turismo cannábico dedicado a quienes fuman esta hierba, para que puedan hacerlo con total libertad y sin necesidad de esconderse o tomar las medidas necesarias como para que nadie se entere.
Vale destacar que el estado de California cuenta con una ley en la que permite el uso medicinal de marihuana. Es por ello que, la duda en cuanto al hotel, es si sus huéspedes necesitarán receta médica para su marihuana o si se estará quebrando la ley.
Pero claro que sí hay información en cuanto a sus 106 habitaciones decoradas con un estilo hippie y de los espacios comunes del hotel en los que se han colocado máquinas dispensadoras de aperitivos para que los huéspedes, luego de fumar, puedan afrontar el hambre… una de las consecuencias del consumo de marihuana.
Es así que aquellos que deseen pasar dos noches en el hotel, deberán pagar los 420 dólares (313 euros) que se cobra para consumir cannabis sin ocultarse.