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07 marzo 2008

Bolivia: Copacabana


Copacabana es un pequeño pueblito en Bolivia. Lo encontramos en las orillas del lago Titicaca, en una península que se une a tierra firme en Perú. Porque este majestuoso lago es frontera entre Bolivia y Perú. Mas sin embargo la península se encuentra en el lado del Perú pero pertenece a Bolivia. Para llegar a Copacabana en automóvil desde La Paz, sin pisar territorio del Perú, es necesario cruzar el lago. Lo cual no es ningún problema porque en el Estrecho de Tiquina tienen unas barcazas donde cruzan los ómnibuses llenos de personas.



Tal vez ir a Copacabana no indique tener significado alguno, excepto por las vistas que son increíbles y las truchas del lago que son una exquisitez. Sin embargo es en Copacabana donde está el santuario de la Santísima Virgen de la Candelaria, o como también le llaman, la Virgen de Copacabana. No vamos a entrar aquí en diferencias de religiones pero si quiere ver fe en los creyentes, visite esta iglesia. Dicen que esta imagen de la virgen es sumamente milagrosa.



También nos dijeron que los sábados aquello se llena porque toda persona, incluyendo los residentes de La Paz, que ha adquirido un automóvil esa semana lo trae para bendecidlo frente a la catedral. El pueblito aunque pequeño es muy alegre y está bien equipado para el turismo. Si se llega hasta Bolivia trate de visitarlo, sólo las obras de arte en el templo son suficiente razón para darse el viaje. Nosotros, fuimos a conocer y venerar la Virgen de Copacabana.



fuente: caminandosinrumbo.com

20 febrero 2008

Piriápolis, Uruguay

En la costa sur del Uruguay, la del Río de la Plata, hay una ciudad llamada Piriápolis. Hemos tenido la oportunidad de visitarla un par de veces. En ambas ocasiones fue la misma impresión la que captamos. Piriápolis tiene una atmósfera tan agradable, que nos es imposible olvidarla. No es lo grande sino lo amplio, tampoco lo lujoso sino lo cómodo que hace de esta ciudad un lugar tan atractivo.Cierto que es un centro turístico muy popular durante el verano. En ese tiempo es difícil conseguir reservaciones en cualquiera de sus muchos hoteles y en la avenida próxima a la playa, la Rambla de los Argentinos, es casi imposible conducir un auto por la cantidad de personas. Pero nuestras visitas no fueron durante la temporada y de veras que nos dieron deseos de alojarnos en un hotel y pasarnos un par de días allí disfrutando de la brisa marina, o tal vez más correcto, del río. Durante estas visitas había varios hoteles y restaurantes abiertos al público.





Como en el resto del Uruguay que hemos visitado, el respeto hacia el prójimo es máximo. No existe la tensión de que uno no puede estacionar el auto aquí o allá porque enseguida le ponen una multa o la policía le manda a remover el carro. En los restaurantes no existe la prisa ni la más mínima indicación que uno se tiene que apresurar. El trato, desde las oficinas de información turística del gobierno hasta los hoteles, que sólo fuimos a preguntar, es pura cordialidad y atención. Y bueno, así fue todo lo que nosotros tuvimos oportunidad de hacer. Es una cosa que le dan deseos de quedarse.

Como ya mencionamos, Piriápolis se encuentra en la costa del Río de la Plata. Desde Montevideo, a unos 100 kilómetros al oeste, el viaje se puede hacer por carretera y toma poco más de una hora manejando con precaución. Desde Punta del Este, a unos 40 kilómetros al este, la travesía toma una media hora por carretera.




Entre Piriápolis y la carretera entre Montevideo y Punta del Este hay un zoológico muy peculiar. Se llama la Estación de Cría de Fauna Autóctona del Cerro Pan de Azúcar y está en las faldas del cerro que le da su nombre. Lo muy interesante de este zoológico es que han logrado criar varias especies que están en peligro de extinción. Las presentaciones de los animales son de gran gusto, atractivas y muy reales. Hemos visitado muchos zoológicos en nuestros viajes, este no será uno de los más grandes y no tendrá jaulas caras, pero es uno de los mejores y más interesantes que hemos visto. Es un lugar muy agradable, no sólo para las personas interesadas en la ecología. Cuando visite Piriápolis, no deje de llegarse hasta allí.



Otras atracciones propias de esta ciudad es subir los cerros. Como estas elevaciones son redondeadas no indican su altura con franqueza, sin embargo una vez que se emprende el ascenso, sí nos damos cuenta de inmediato que el ejercicio no va a ser tan ligero como aparentaba ser. Como ciudad de playa, o balneario como le llaman allí, es el disfrutar del sol otra de las actividades populares. Nos dijeron que en tiempo de temporada la vida nocturna, discotecas y reuniones de grupos de amigos, es muy activa. Durante este tiempo el Hotel Argentino, no se preocupe que es tan grande que aunque no lo busque lo va a encontrar, tiene todas sus facilidades operando entre las cuales, según nos dijeron, se incluyen casino, baños termales, terapia de estética y todo lo que uno se puede imaginar para complacer al turista.

Fuentes: caminandosinrumbo.com

Bolivia lago Titicaca

El hombre siempre ha tratado de narrar lo que de las aguas del Titicaca no se ha podido llevar. Cuentan que bajo su superficie existen ciudades abundantes en oro y plata, pero aun no se han podido encontrar. Dicen que en sus aguas viven sirenas de canto dulce y mortal. Lo cierto es que crecen unas truchas allí de sabor excepcional. Y muchas, muchas leyendas más, que si no son ciertas, por lo menos entretienen toda una noche.




Al Titicaca le llamaban el lago más alto del mundo. Entonces, después de ser desaprobado, le calificaron como 'navegable'. Sólo para más tarde volver a rectificar. Se ha dicho que no tiene fondo, pero los instrumentos modernos hasta una medida le han dado. Y para los que necesitan números exactos, aquí le damos algunos datos, de lo preciso y mundano.
Este lago se encuentra en el altiplano andino, en la frontera entre Perú y Bolivia. La superficie abarca unos 9000 kilómetros cuadrados y descansa a unos 3800 metros sobre el nivel del mar. Su profundidad máxima se estima ser de unos 460 metros. Claro, todas estas medidas aumentan según la ferocidad de las lluvias. El lago actual es una muy pequeña porción de lo que una vez fue un inmenso mar.
Se conoce de varias culturas que por muchos años vivieron en las regiones de los altos Andes. Por lo menos dos de éstas lograron alcanzar el grado de imperios, a los cuales llamaremos civilizaciones para ser menos criticados. La civilización de Tiwanaku y la muy conocida de los Incas. Dos pueblos sumamente religiosos pero también avanzados. Lo interesante es que en la mitología de los dos se presenta el génesis con sus líderes surgiendo de las aguas del lago Titicaca. Muy posible que de verdad sea un lago sagrado.




Para el turista aficionado, no se preocupe usted que ya parte de este encanto está bien comercializado. Hay botes y lanchas de todos tipos y tamaños. Hay unas lanchas que navegan sobre esquíes y hay otras construidas de hierbas como las hacían hace cientos de años. También hay hoteles con saunas y restaurantes sirviendo delicias por platos. Visite el Restauran Panamericana en Huatajata y trate el cebiche y trucha del lago.



Dicen que en invierno, en el mes de agosto, ocurren tormentas en el lago. Nosotros estuvimos en marzo del 2001 después de una abundante temporada de lluvia. El Titicaca estaba crecido, sus aguas cubriendo más allá de sus límites usuales. Aun así, pudimos disfrutar y visitar todo lo que el camino nos indicó.El Titicaca es algo muy especial. Rodeado por montañas, algunas nevadas; de entre sus aguas se elevan islas que no son más que otros picos en la cordillera. En estas islas es donde la magia ocurre, según cuentan las leyendas.
Trate por todos los medios de llegar hasta la Isla del Sol. No sabemos toda su historia pero sí estamos seguros que es más extensa y colorida de lo que cuentan. Por lo menos va a encontrar un manantial de tres fuentes. No se preocupe de buscarlo, a todos los turistas nos llevan hasta allí. Al manantial que nos referimos le llaman la Fuente de la Juventud. De acuerdo al cuento de los guías, quien tome agua de él rejuvenece 10 años. A nosotros no nos interesa rejuvenecer ni un día, pero era tanta el agua que fluía que por absurdo que suene, diremos que fue una de las fuentes quien insistió. Con todo respeto bebimos y todo nos fue de maravilla.

Fuentes: caminandosinrumbo.com

Buenos Aires Argentina





Buenos Aires es una ciudad dinámica en avanzada. Hay quienes la describen como una locura por su alegría y muchas actividades. Nosotros aunque sí vivimos ese carnaval durante nuestra corta visita, también tuvimos la oportunidad de captar otra cara más seria, digamos más formal. Porque si es locura lo que usted busca, oh, allí la va a encontrar. Sin embargo, es también una ciudad precisa, avanzando como la puntualidad de un reloj y la exactitud de un banquero. Una metrópolis no satisfecha con una mala jugada del destino que se esfuerza con toda la gracia de una gran capital por recuperar su lugar entre las más importantes del planeta.





Los porteños, como en el presente se le llama a los residentes de Buenos Aires, son gente ocurrente y de buen humor. Los porteños también son sumamente respetuosos y educados. Personas que se comportan de acuerdo al tema y profundidad del momento o la conversación; pueden ser bien alegres y jaraneros, serios y constantes, dispuestos a tanto aportar sus conocimientos como aceptar puntos de vistas de otras culturas diferentes. Gente de mucho tacto y talento que por intuición sabe cuando invitar y cuando aceptar una invitación. De verdad que tanto Buenos Aires como sus ciudadanos nos sorprendieron y nos sentimos muy alagados que nos hayan permitido haber sido sus huéspedes por unos días.



Cuando decimos Buenos Aires en realidad, por lo que captamos en este viaje, podemos referirnos a tres divisiones políticas diferentes. Buenos Aires capital de la Argentina es donde se concentró nuestra visita. Esta ciudad es una Ciudad Federal, no respondiendo a ninguna de las provincias que integran la nación de Argentina; algo así como Washington D. C. en los Estados Unidos o México D. F. en México. Según nos dijeron en la Ciudad Federal viven de tres a cuatro millones de personas.

Buenos Aires también es el nombre de una de las provincias de Argentina. La nación se compone de más de veinte provincias (similar a las provincias, estados o departamentos en otros países); a la que nos referimos aquí es una de esas provincias y se encuentra alrededor de la capital. La ciudad de La Plata es la capital de la provincia de Buenos Aires.

Por último, Buenos Aires también puede ser la metrópolis formada por la Ciudad Federal y las zonas urbanas de la provincia próxima a la capital. A esta metrópolis también se le llama Gran Buenos Aires. Es un área bien extensa; estimándose que una tercera parte de la población de toda Argentina, aproximado de unos trece millones de personas, viva en esta zona.



Un dato que notamos, y tal vez le sea de utilidad a quienes deseen visitar esta ciudad, es la cantidad de restaurantes que hay; no es necesario hacer planes para el almuerzo. No importa donde uno se encuentre, a la hora deseada puede ir a comer o cenar a pocos metros de donde esté en ese momento. Los otros turistas que conocimos en el viaje llevaban listas interminables de restaurantes recomendados; nosotros almorzamos donde los deseos nos lo indicaban. Cuando comparamos notas con estos otros visitantes, estábamos parejos. Claro, no podemos negar el hecho de que buscar una localidad le provee un objetivo que en el proceso le lleva a conocer toda la ciudad; nosotros, como de costumbre, ponemos énfasis en que el objetivo sea el ver la ciudad y compartir con sus ciudadanos. Pero bueno, terminamos parejos, tanto en almorzar bien como en disfrutar de Buenos Aires.

Si va acompañado, el almuerzo es un momento perfecto para conversar, la sobremesa llegando a prolongarse por horas si así lo desea. Las tiendas las encontramos muy bien surtidas con ropa muy elegante y otros artículos de muy buena calidad. Hay varias calles cerradas al tráfico de automóviles que se han designado peatonales. En estas peatonales frente a algunas tiendas, y otros por su propia cuenta, se ven jóvenes bailando tango, danzas típicas de otras partes de la Argentina, danza moderna, músicos y en realidad todo tipo de espectáculo de este tipo.



Los cines, en algunas partes, están uno al lado del otro por cuadras. En este viaje preferimos prestarle más atención a la vida diurna, mas según nos dijeron las discotecas y vida nocturna en general es estupenda. Aunque si salimos en un par de ocasiones de noche y sí vimos todo muy iluminado y todos los restaurantes abiertos hasta bien tarde.
Los hoteles son muchos y están bien integrados dentro de la ciudad. Por experiencia propia en este viaje de noviembre del 2003 y otro que tuvimos que cancelar en el 2000, no se le vaya ocurrir ir sin reservaciones. Nuestra experiencia con nuestro hotel fue excelente, la de otros turistas con quienes conversamos y que se hospedaron en otros hoteles fue similar. Realmente en nuestro hotel trataban de hacer todo lo posible por que nos sintiéramos bien a la vez que con mucho tacto mantenían un ambiente argentino. Una experiencia muy bonita.Tómelo por seguro que en Buenos Aires no se va a aburrir, sea de placer o negocios el viaje. Tan pronto usted logre hacer alguna amistad, lo cual va a ser bien fácil porque los porteños de ambos géneros son muy alegres y amigables, ya la ciudad es suya. Pero si se diera el caso, no hay problemas; las agencias de viajes tienen una cantidad bien variada de tours locales, desde show nocturnos de tango hasta visitas a alguna hacienda cercana. También le pueden preparar un tour a cualquier otra localidad en la Argentina, incluyendo las cataratas de Iguazú y el sur de la Argentina que dicen que es precioso, y también se puede dar su vueltecita por Montevideo que por lancha se encuentra a dos horas y medias del centro de Buenos Aires. Quedamos muy complacidos y ya hemos incluido esta ciudad entre las favoritas nuestras.
fuente: caminandosinrumbo.com

08 febrero 2008

Uruguay: Maldonado


Proyectándose hacia el Atlántico Sur, emerge orgullosa una estrecha franja de tierra dividiendo las aguas del Río de la Plata y del Océano Atlántico...
Punta del Este.

Maldonado
Esta ciudad combina actividades para todos los estilos, kilómetros de maravillosas costas y aguas prístinas, casas con jardines magníficos y los atardeceres mas increíbles.

ALOJAMIENTO
Punta del Este ofrece una variada gama de posibilidades de alojamiento. Todo tipo de hoteles, de una a cinco estrellas, además de los hostels u hostales, las posadas, los residenciales y las chacras turísticas e incluso los campings.

La oferta es amplia y abundante, excepto en períodos críticos como fin de año, carnaval y semana santa en que la capacidad hotelera se ve colmada y donde encontrar un lugar para dormir puede ser una aventura agotadora y por lo general infructuosa.



GASTRONOMIA
Punta del Este ofrece una variada gama de posibilidades gastronómicas. Todo tipo de restaurantes, de uno a cinco tenedores, además de las clásicas pizzerías y chiviterías, los paradores sobre la playa, y los barcitos y parrilladas.

Brasilia


El presidente Juscelino Kubitschek, haciendo realidad su promesa de campaña electoral de “cincuenta años de progreso en cinco”, en 1956 puso en marcha el ideal, concebido en 1789 y expresado en el artículo 3 de la Constitución de la República redactada en 1891, de construir una nueva ciudad capital al enviar al Congreso el “Mensaje de Anápolis”. Siendo aprobado ese mismo año por la Cámara y el Senado, quedó la obra del planeamiento urbanista en manos de Lúcio Costa y el diseño de los edificios en las del arquitecto Oscar Niemeyer.

No todo fue fácil, además de tener que abastecer a la nueva ciudad de todas las necesidades, desde el concreto para las construcciones hasta las cucharas de los restaurantes, también tuvieron que construirse carreteras de acceso que unieran a la nueva localidad, hasta entonces prácticamente despoblada, con el resto del país. Y por su puesto que hubo gran oposición de parte de muchos ya acostumbrados a las comodidades de Río de Janeiro. Sin embargo, el 21 de abril de 1960, las palabras de Kubitschek se hicieron tangibles al ser inauguraba Brasilia.

Se le critica a Kubitschek la deuda e inflación que el proyecto acelerado de la capital llevó al país. Nosotros no sabemos de economía y mucho menos nos atreveríamos a criticar a un presidente elegido por un pueblo tan noble como lo es el brasileño. Lo que sí afirmamos es que desde su inauguración siempre hemos deseado visitar a Brasilia, y ya complacido nuestro deseo sólo nos queda otro y ese es, volver a visitarla.




El centro de Brasilia fue delineado con un amplio corredor de jardines delimitado por dos amplias avenidas que separan la ciudad en dos zonas similares, la norte y la sur. Culmina el corredor en la Plaza de los Tres Poderes, donde radican el Tribunal Supremo Federal, el Congreso Nacional con sus dos cúpulas y torres gemelas, y el Palacio de Planalto donde radica el presidente o poder ejecutivo. Antes de la Plaza de los Tres Poderes se encuentra la Explanada de los Ministerios con sus edificios de apariencia similar, continuados por los sectores culturales norte y sur. Las dos avenidas del corredor central, las cuales reciben diferentes nombres en su transcurso, son atravesadas por otras avenidas que corren creando un semicírculo o arco. Por eso dicen que vista desde el cielo tiene la forma de un pájaro en vuelo o un avión. El corredor central siendo el cuerpo o fuselaje y las avenidas que lo atraviesan formando las alas.
Al este del centro está el lago Paranoá, creado por la mano del hombre y de considerables dimensiones. Al oeste la cruza la carretera Rodoviária que hacia el sur, o bien directo o por intercepciones con otras carreteras, conduce a São Paulo, Río de Janeiro y otras ciudades y hacia el norte hacia Formosa, Salvador de Bahía y demás destinaciones.
Un lugar ideal de donde poder apreciar el centro de Brasilia es la Torre de Televisión, en el corredor central y aproximadamente un kilómetro de la Plaza de los Tres Poderes. Desde esta torre se divisa la hermosura y organización del diseño arquitectónico. Claro, después hay que ir y admirarlos de cerca. Muy atractiva es la catedral metropolitana de Nossa Senhora Aparecida. La entrada es subterránea, o al menos hay que bajar por una rampa como entrando en un túnel. El Palacio Itamaratí y el Palacio de Justicia son otros edificios de atractivo peculiar que se deben ver. Hay varios museos y otros edificios que también merecen atención, pero nuestro tiempo era muy limitado y preferimos tener una excusa para justificar el regreso. El zoológico tiene una bonita e interesante colección de animales en un amplio parque donde pasar un buen rato en contacto con la naturaleza.



Tenemos entendido que el día de la inauguración en toda Brasilia sólo habían 150 habitaciones de hoteles disponibles, lo cual creó algo de conflicto ya que sólo los invitados diplomáticos sumaban unas cinco mil personas. De este problema ya no hay que preocuparse, a no ser que sea un día muy significante. Desde la Torre de Televisión vimos una buena cantidad de hoteles que a simple vista cada uno de ellos indican superar el número total con que la ciudad contaba en su inauguración. Los hoteles se encuentran en el Setor Hoteleiro Norte y Setor Hoteleiro Sul, tenemos entendido que la calidad y el precio varían desde lo lujoso hasta lo práctico. En el sector sur, próximo al lago, hay muchos restaurantes, almorzamos en uno de ellos con gran satisfacción y aunque sí fue uno de los caros, el costo fue muy reducido comparado con otro de la misma cadena de restaurantes y similar menú en los Estados Unidos.



Alrededor de lo que es el centro de Brasilia se han ido construyendo repartos o suburbios que según nos dijeron son consideradas ciudades anexas. En algunas de estas ciudades vimos residencias muy bonitas, otras no aparentan ser muy prósperas. Nos informaron que en total la metrópolis cuenta con tres millones de habitantes. En los bajos de Torre de Televisión hay un sinfín de tiendecitas de souveniers donde se puede comprar todo tipo de recuerdos. No tuvimos ningún tipo de inconveniente, al contrario, todo el mundo muy amable y cortés. Y aunque podríamos continuar indefinidamente contando esta exitosa visita, sólo nos queda decirle que si algún día se decide por viajar, Brasilia es un destino ideal.
fuente: caminandosinrumbo

Esteros del Ibera Corrientes


La Reserva Natural del Iberá es un lugar de ensueño enclavado en el corazón de la provincia de Corrientes, admirado por aventureros apasionados por la generosidad de la naturaleza.

Este paraíso natural alberga al yacaré, al ciervo de los pantanos, al lobito de río, y al aguará guazú, especies reconocidas como Monumentos Naturales de la Provincia de Corrientes.

La Reserva Natural del Iberá, o agua brillante en guaraní, contiene lagunas y espejos de aguas menores, abarcando cientos de miles de hectáreas, conformando uno de los circuitos de turismo aventura más atractivos de la Argentina.
lojarse en localidades cercanas y comenzar las mañanas con un enriquecedor avistaje de fauna y flora, safaris fotográficos, cabalgatas, recorridos en canoas o trekking, es la oferta que nadie se puede perder si visita Corrientes.



La irupé, la aguapé, las lentejuelas de agua y las amapolas son algunas de las especies acuáticas que caracterizan a los Esteros del Iberá, y que además desempeñan un papel fundamental dentro del ecosistema.

Disfrutando de la naturaleza reinante en los Esteros del Iberá, Corrientes, no dejará de asombrarse con las garzas moras, cigueñas, y biguás, algunas de las 350 especies de aves que surcan los cielos de Corrientes.

Dorados, sábalos, mojaras y pirañas, se dejan ver a través de las aguas claras de las más de 60 lagunas del Iberá.

Además de la diversidad de flora y fauna, el contexto que envuelve a los Esteros del Iberá es mágico y acogedor, llenando de entusiasmo los corazones, y abriendo los ojos a un mundo que está al alcance de todos.

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